Arranca la cuenta atrás para la apertura de puertas de la 53ª edición del Festival Internacional de Cine Fantástico de Cataluña, conocido en el mundo entero con el nombre de la localidad costera que lo acoge desde su fundación en 1968, Sitges. Se prepara una edición única, en formato híbrido entre presencial y online, con el objetivo de mostrar y confirmar el buen momento que vive el cine fantástico, pese a las circunstancias actuales que cada día traen noticias de proyectos, rodajes y estrenos aplazados.
Esta semana se presentaba la programación completa de esta entrega atípica, una propuesta atrevida e innovadora que dará visibilidad a los nuevos talentos del género y servirá como espacio de recuerdo y homenaje a grandes clásicos.
No faltarán dos grandes apellidos muy ligados a la trayectoria del festival. Por un lado, Sitges ha anunciado que este año otorgará el Gran Premio Honorífico al magistral cineasta norteamericano David Lynch, una entrega que lamentablemente se realizará de forma virtual. Nominado al Óscar como director en tres ocasiones y como guionista en otra, recibió el Premio Honorífico de la Academia en su pasada edición, a la edad de 73 años. En la pantalla de Sitges, han podido verse en ediciones anteriores: Terciopelo azul, su cuarto largometraje, con el que logró el Premio a la Mejor Película; Corazón salvaje, en 1991; y, diez años más tarde, Mulholland Drive. En esta ocasión, la seleccionada para la clausura y broche final del Festival será El hombre elefante, que se proyectará remasterizada en 4K para celebrar el 40º aniversario de la cinta que le situó en Hollywood.
Su hija Jennifer Lynch ha seguido sus pasos tras debutar en 1993 con Mi obsesión por Helena, en 2008 recogía en Sitges el Premio a la Mejor Película con Surveillance, una sorprendente historia de asesinos en serie. Además, cuatro años más tarde regresaba al festival con su cuarta película, la sobrecogedora historia de un secuestro titulada Chained, y se llevaba a casa el Premio Especial del Jurado. Para televisión, ha trabajado en la realización de numerosas series, como The Walking Dead, Daredevil o American Horror Story.
De otro lado, en el catálogo de la presente edición del festival, que abarca más de 170 producciones, destaca Possessor, de Brandon Cronenberg, otro apellido ilustre y frecuente en Sitges. Su padre, David Cronenberg, logró en 1975 los premios a la mejor película y al mejor director con Vinieron de dentro de… (Shivers). Posteriormente, el canadiense presentó en Sitges Rabia (1978), Cromosoma 3 (1979), Inseparables (1989) y La Mosca (1986); y, en 2002, fue coronado nuevamente por la dirección de Spider, el mismo año en que el festival le concedía el premio honorífico Máquina del Tiempo. En 2014, presentaba Maps to the Stars, un cruel retrato de la vida de las estrellas de Hollywood protagonizado por Julianne Moore. Además, el año pasado, Sitges programó la proyección de la versión 4K sin cortes de la película de culto Crash, basada en la novela escrita por J.G. Ballard, que en 1996 supuso para Cronenberg el Premio Especial del Jurado de Cannes.
Por su parte, Brandon participaba en 2012 con su ópera prima, Antiviral, un thriller médico no apto para hipocondríacos que también pasó por Cannes y Toronto. Curiosamente, coincidió aquel año en la sección oficial con su progenitor, quien competía con Cosmópolis, adaptación de la novela de Don DeLillo protagonizada por Robert Pattinson. El hijo se llevó el Premio Citizen Kane al mejor director novel y el reconocimiento a la mejor película del Jurado Carnet Joven.
Su regreso llega marcado por un thriller de estética deslumbrante y perturbadora violencia, con Andrea Riseborough (Mandy), Jennifer Jason Leigh y Sean Bean en el reparto. En Possessor, Tasya Vos trabaja en una organización secreta que usa una tecnología de implantes cerebrales para “poseer” los cuerpos de otras personas con el fin de llevarlas a cometer asesinatos.
Sitges 2020 abrirá el próximo 8 de octubre con la proyección de Malnazidos, una película de acción y zombis ambientada en la Guerra Civil española y codirigida por Javier Ruiz Caldera y Alberto de Toro. Por otro lado, en la sesión inaugural se presentará el cortometraje Dar-dar, de Paul Urkijo Alijo, quien vuelve a recurrir a las leyendas vascas para su nuevo trabajo tras Errementari: El Herrero y el Diablo (2017).
Éstas son solo unas píldoras de un programa de proyecciones absolutamente envidiable y digno del mejor festival de cine fantástico del mundo.