Fecha de estreno en España: 13 de enero de 2012
Género: Comedia, Terror
País: España – Cuba
Año: 2011
Duración: 100 mins
Dirección – Alejandro Brugués | Guión – Alejandro Brugués | Producción – Claudia Calviño, Inti Herrera, Gervasio Iglesias| Fotografía – Carles Gusi | Montaje– Mercedes Cantero
Reparto: Alexis Díaz de Villegas (Juan), Andrea Duro (Camila), Andros Perugorría (Vladi California)
Es un hecho que somos muchos los que nos contamos entre los hastiados por la sobreexposición al fenómeno zombi debido a que, de un tiempo a esta parte, son muchos los que se han subido a ese carro sin aportar algo interesante. Aún así, todavía hay gente que todavía tiene cosas que decir utilizando la metáfora de los muertos vivientes para reírse de una realidad difícil y en ocasiones más terrorífica que lo propuesto por la propia película. Este es el caso de Juan de los Muertos.
Si Shaun of the Dead usaba el universo de George A. Romero como base de su tesis, encontramos que los creadores de Juan de los Muertos se encuentran más cercanos a la trayectoria de Lucio Fulci y otros europeos entre sus referentes. Como era de esperar, la película no deja pasar la oportunidad de criticar el régimen que gobierna Cuba desde hace más de cincuenta años, lo que en muchos aspectos la hace realmente única.
Es precisamente ese ingenio innato de la población cubana el que ejerce de motor de la trama y convierte a un personaje sin oficio ni beneficio en el cabecilla de un grupo dedicado a hacer descansar de una vez por todas a esos seres queridos zombificados que son una molestia para los familiares todavía vivos. En este punto el film se emparenta también brevemente con el mundo del videojuego, al quedar integrado el grupo por una serie de personajes pintorescos, cada cual con una habilidad que lo hace único y que consigue que individualmente luzcan en el momento adecuado.
El acabado del film es algo desigual, ya que depende en parte de unos efectos digitales a ratos grandiosos pero en algunos momentos poco logrados. Realmente no es algo que importe demasiado para el disfrute del film, pero en cualquier caso se echa en falta algo de equilibrio en este apartado. Otro problema técnico y a la vez cultural, impide a los que no hayan vivido en la isla durante una etapa prolongada, entender algunos de los diálogos, ya sea por el particular acento como por un sonido directo no del todo cuidado.
A pesar de ser eminentemente cómico, el film no deja de presentar personajes de carne y hueso que consiguen conectar con la audiencia. La cinta es una buena comedia negra, que a pesar de tener puntos en común con algún que otro título reciente, no deja de tener su encanto y su propia personalidad.