Género: Sci-Fi | Acción
País: Estados Unidos
Año: 2013
Duración: 109 mins.
Fecha de estreno EEUU: 09 de Agosto de 2013
Fecha de estreno España: 16 de Agosto de 2013
Web oficial: http://sites.sonypicturesreleasing.es

Dirección – Neill Blomkamp | Guión – Neill Blomkamp | Producción – Simon Kinberg, Bill Block y Neill Blomkamp | Montaje – Julian Clarke y Lee Smith | Fotografía – Trent Opaloch | Música – Ryan Amon

Reparto: Matt Damon (Max), Jodie Foster (Delacourt), Sharlto Copley (Kruger), Alice Braga (Frey), Wagner Moura (Spider), Diego Luna (Julio), William Fichtner (John Carlyle), Josh Blacker (Crowe), Brandon Auret (Drake)

En 2009 vivimos un hecho inusitado: dos directores novatos debutaban con sendos proyectos de intachable factura técnica, de una solidez narrativa incontestable y ambos enmarcados en el campo de la ciencia ficción. Neill Blomkamp y Duncan Jones desencajaron las mandíbulas de medio mundo sabiendo hacer lucir en pantalla cada dolar de sus reducidos presupuestos, a la vez que narrando con una solidez nada propia de su falta de experiencia. District 9 y Moon se convirtieron rápidamente en piezas de culto que inflamaron las expectativas sobre los siguientes trabajos de sus respectivos directores. Duncan Jones consiguió mantener intacto nuestro respecto con la nada desdeñable Código Fuente, éxito que le ha catapultado hacía las bastas y peligrosas tierras de World of Warcraft. Blomkamp sin embargo, prefirió tomarlo con calma e intentar desarrollar un proyecto más personal y más cercano a su primer trabajo.

Elysium es el nombre de la estación espacial que sirve como McGuffin en esta cinta. Allí donde todo el mundo quiere ir pero donde solo unos pocos privilegiados pueden acceder. Una base orbital toroide donde los ricos disfrutan de una vida alejada de la sobrepoblación, la pobreza y la inmundicia que asola la tierra. ¿Lucha de clases dice alguien allí al fondo? Ciertamente, de nuevo el tema ya expuesto, desarrollado y analizado en la opera prima de Blomkamp. Si a eso le añadimos que la gran parte del film tiene lugar en esa versión favela de Los Angeles, entorno que parece extraído directamente de los guetos sudafricanos de District 9, podemos pensar que el director muestra ya signos de autoría, o si somos malpensados, que directamente se empieza a repetir.

Jodie Foster

Pero teniendo en cuenta que Blomkamp ya había tratado estos temas y mostrado estos entornos en sus celebrados cortometrajes, no está de más celebrar que, a pesar de la reiteración, el director no abandone el subtexto social en su obra, algo que personalmente recibo con sorpresa y agrado cuando se hace correctamente en narraciones de corte futurista. Lamentablemente la exposición en este caso es tan poco sutil que puede desagradar a los que disfrutamos con el verismo y la crudeza del film previo. Aquí los antagonistas rallan el dibujo animado, chirriando sobremanera al lado de un personaje principal tan atado a la realidad. Los problemas de tono en el film son evidentes, cuando se pierde la credibilidad de los elementos de ciencia ficción al incurrir en errores de libro. Incluir una pantalla con un mensaje en rojo parpadeante no me hará creer que los malos han conseguido cerrar el cerco, por muy rojo y muy parpadeante que sea el mensaje.

No negaré la espectacularidad del film a nivel visual, campo que el director controla en todos los sentidos. Sin embargo, y volviendo a la comparación que la opera prima de Blomkamp, se hace increible que con 80 millones más de presupuesto se haya logrado un resultado igual o quizá inferior al de aquel film que era capaz de mantener en pantalla a una criatura digital casi en la totalidad de metraje. Si recabamos algo de información sobre los efectos visuales de Elysium, encontraremos que para simular el aterrizaje de la nave de transporte se ha utilizado un helicóptero, que en postproducción se ha eliminado y se ha sustituido por el CGI correspondiente. ¿Dónde quedaron los días de usar ventiladores para levantar polvo?

Elysium es un McGuffin no solo para la trama, sino también para el espectador, que se queda como los desterrados en la tierra, soñando con esa estación espacial de la que no se muestra mucho más de lo que se ve en los tráilers. Un guion apresurado, nada sutil y con un mensaje escrito en letras mayúsculas. Una decepción que nos costará tiempo olvidar.

Cartel Elysium