A Todd Haynes le encantan las historias que suponen un retrato psicológico de sus personajes y le fascina afrontar tramas que confrontan la moralidad establecida ya sea en el presente o en algún pasado donde se desarrolla el argumento. En algunos de sus títulos de corta más clásico, como Lejos del Cielo o Carol, algunos de aquellos dilemas han sido superados, sino totalmente, sí en gran parte, por nuestra sociedad, como el adulterio, la homosexualidad o las relaciones interraciales.

CICATRICES

Secretos de un Escándalo se aleja de la ambientación en los años cincuenta de aquellas para ambientarse en la actualidad, además con un tema candente en nuestra sociedad, el estupro. La trama se construye sobre las cenizas de un escándalo, la relación de una mujer casada de mediana edad con un adolescente de 13 años. Lejos de situarnos en el ojo del huracán del tabú, la cinta se ambienta veinte años más tarde, cuando esa pareja ha alcanzado una estabilidad, ha tenido hijos que ahora abandonan el nido, y que se han ganado, aparentemente, la aceptación social de su relación. Sin embargo, el interés de Haynes no es tanto el escándalo en sí, sino las cicatrices que deja esta situación y los asuntos no resueltos que reflotan cuando alguien agita el avispero.

MANTIS

El tour de forcé interpretativo entre Natalie Portman y Julianne Moore es extraordinario, la actriz que interpreta Portman se convierte en una especie de parásito que se alimenta de la carga emocional sostenida y acumulada por los personajes, al mismo tiempo que emprende un proceso de replicación del personaje de Moore, una ama de casa ultraprotectora y castrante que afronta el síndrome del nido vacío.

Ya sólo con el choque entre estos dos personajes teníamos suficiente para construir una historia tensa y de suspense; sin embargo, la sorpresa llega con el papel de Charles Melton, quien consigue robar la función a las dos estrellas femeninas. El punto de ruptura de este personaje obligado a perder su infancia y que la vive desde la perspectiva de sus hijos y que actúa como el marido perfecto al mismo tiempo que se siente atrapado en una relación que se sustenta más en el chantaje sentimental que en el amor o el deseo inicial.

EL MENSAJERO

Nos parece curiosa la referencia a la película El Mensajero de Joseph Losey de 1971 a través de la reconstrucción que el compositor Marcelos Zarvos ha hecho de la partitura original de Michel Legrand. En aquella película Losey nos contaba la historia de un niño de 13 años, fascinado por la hermana mayor de un amigo suyo, y que se convierte en el mensajero entre ésta y su amante. La sexualidad prohibida se convierte por lo tanto en un elemento común entre estas dos historias. Haynes aporta a la trama de Secretos de un Escándalo un tono de sexualidad contenida, a punto de reventar, donde los diferentes personajes se ven de una manera más o menos explícita seducidos por esa extraña actriz que se alimenta de las pasiones y frustraciones de los otros personajes.

ROTURAS

No se trata de una historia que pretenda resolver todas las preguntas que plantea, pero, mostrando las roturas en esa realidad idílica que parecen vivir los personajes, nos deja suficientes pistas como para que seamos capaces de descifrar los secretos callados por los personajes.

Póster Secretos de un escándalo. (c) Diamond Films
Póster Secretos de un escándalo. (c) Diamond Films