Durante los días del Festival de Cine Fantástico de Canarias, los cinéfilos pudieron apreciar, en las dos salas asignadas por Multicines Tenerife, el correctísimo filme dirigido por John Hyams, Alone. Es un remake de una película sueca llamada Gone (Försvunnen, Suecia, 2011), dirigida por Mattias Olson y Henrik JP Àkesson. Mattias Olson, también guionista del filme sueco, además de codirector, ejerce mismas labores en el libreto de este remake.
El filme propone un juego bastante familiar en el thriller estadounidense “con psicópata”, bastante propio de los años 80 y 90 del siglo XX. En aquellas décadas florecieron las producciones con un perturbado complicándole la vida al protagonista (o a la protagonista) y a su entorno, en un macabro y tóxico juego del gato y el ratón.
Entre estos filmes de este tipo, encontramos algunos botones de muestra ambientados en autovías del país, como son Carretera al Infierno (The Hitcher, EEUU, 1986), de Robert Harmon (que tuvo a su vez un olvidable remake en 2007), o esa especie de actualización del cuento de Caperucita Roja que fue el thriller Freeway (Sin Salida) (Freeway, EEUU, 1996), de Matthew Bright. Los filmes de Harmon y de Bright se colocan a la cabeza de las referencias de este de Hyams, que también transcurre en carretera y parajes naturales. Pese a la familiaridad de su trama, no debemos pasar por alto este filme, rodado con una absoluta pulcritud y corrección con unos resultados muy estimulantes.
Otras referencias
A Alone podemos colocarla igualmente en un grupo de filmes recientes, donde vemos a un personaje femenino aparentemente vulnerable, pero definitivamente potente, que sobrevive a una amenaza masculina en un entorno salvajemente hostil. Hablamos de títulos como Range Runners (ídem, EEUU, 2019) de Phillip S. Plowden, Swing Low (Ravage) (EEUU, 2019), de Teddy Grennan, o de la francesa Revenge (ídem, Francia, 2017), de Coralie Fargeat.
El realizador John Hyams es hijo del también realizador y guionista Peter Hyams, autor de piezas del fantástico tan convincentes como Capricornio Uno (Capricorn One, EEUU, 1978), Atmósfera Cero (Outland, EEUU, 1981) o The Relic (EEUU, 1997), vista ésta última en la tercera edición del Festival de Cine Fantástico de Canarias Isla Calavera (edición 2019), cortesía de la distribuidora Reel One, que la ha editado en formato doméstico.
John Hyams, por su parte, ha dirigido el sorprendente documental Smashing Machine (EEUU, 2002), sobre una lucha extrema prohibida en USA por su brutalidad; el drama de apuestas deportivas All Square (EEUU, 2018); y al actor belga Jean Claude Van Damme en dos secuelas de la franquicia Soldado Universal. Hyams ha realizado también mucha televisión. Capítulos en la serie Z Nation (EEUU, 2014) o Justicia ciega (Blind Justice, EEUU, 2005), avalan una trayectoria profesional de más de 20 años de carrera.
Alone es el filme que coloca a John Hyams en el disparadero de la industria como un talento a tener en cuenta. Su siguiente trabajo es una versión de la mítica película de los 80, Maniac Cop (EEUU, 1988), de William Lusting.
ATENCIÓN: SPOILERS A CONTINUACIÓN
La joven Jessica, interpretada por Jules Willcox, se encuentra en un momento de su vida de shock, de cambios, como consecuencia de una tragedia familiar. Su esposo se acaba de suicidar. Abrumada emocionalmente, la joven decide recorrer un largo camino en su vehículo con un remolque que contiene sus objetos personales. En la carretera se cruza un hombre de mediana edad que conduce un Jeep Cherokee. El conductor juega con ella al gato y al ratón y posteriormente la secuestra. El hombre tiene una macabra doble vida que la joven va descubriendo a medida que avanza la trama.
El filme que comienza como un duelo en carretera, se convierte en un filme de supervivencia, una pugna de la joven víctima por perdurar en un entorno forestal que en otras circunstancias sería un auténtico paraíso en la tierra. Los bosques de Portland, Oregón, proporcionan un solemne marco de terror a plena luz del día. El suspense está dosificado y el crescendo de la acción es óptimo. La inmersión como espectador en la trama es bastante completa.
El filme está dividido en cinco capítulos que van marcando el entorno específico del glorioso paisaje westerniano donde se desarrolla el filme. “Carretera”, “río”, “lluvia”, “noche” y “claro”, son los descriptivos títulos de las cinco partes en que aparece diseccionada la historia.
El reparto
A la competente puesta en escena hay que reseñar la estupenda labor de los actores, la joven Jules Willcox, vista en Lo Que Esconde Silver Lake (Under the Silver Lake, EEUU, 2018) de David Robert Mitchell y en el filme de Sofía Coppola, On The Rocks (2020), y en la serie Bloodline (Netflix, 2015- ), efectúa un importante despliegue físico, y pasa del miedo al dolor físico y a la obstinación por subsistir, con notable convicción. Su personaje que apenas tiene un contexto dramático resulta correctamente construido en su condición de personaje torturado marcado por el shock emocional.
Jessica debe desplegar su inteligencia para librarse del aparentemente encantador conductor, definitivamente perturbado interpretado magníficamente por Marc Menchaca, muy versátil, con un potente personaje entre manos, que pasa de ser un cariñoso hombre de familia, aparentemente de viaje de negocios, pero que desarrolla un terrible “hobby” de asesinatos y secuestros sin la menor contemplación. El personaje pasa de la corrección y educación más pulcra, al sadismo más absoluto. A Menchaca lo hemos podido ver en las miniseries de HBO El Visitante (The Outsider, EEUU, 2020), y Generation Kill (EEUU, 2008).
Reconocida en el Festival Isla Calavera
Alone gustó mucho en la cuarta edición del Festival Isla Calavera, y sin ser un filme que “sorprende”, con innecesarios giros narrativos, fue apreciada en su corrección y sobriedad por parte del Jurado de largometrajes, que le otorgó el premio a la mejor realización, con una mención especial para la actriz Julie Willcox.