Entre las numerosas secciones que engloba el Festival Internacional de Cine Fantástico de Sitges, que celebra a mediados de octubre su 48ª edición, hay un apartado con personalidad propia denominado Brigadoon, como el pueblo mágico del musical. Su programación principal consiste en cortometrajes de producción independiente, que optan al Premio Paul Naschy al mejor corto de género, pero también ofrece proyecciones del cine de terror “más raro, radical y de culto”.
Las claves principales del Brigadoon 2015 ya han sido avanzadas y uno de sus hits será el pase de varios capítulos de la mítica serie de Televisión Española Historias para no dormir, del visionario Narciso Ibáñez Serrador. La selección de episodios aún se encuentra inédita en formato DVD e incluye el primer título que se emitió, en blanco y negro, el 4 de febrero de 1966, “El cumpleaños”. Dirigido y con guion del propio Ibáñez Serrador, que firmaba con el pseudónimo Luis Peñafiel, está basado en el relato corto del autor estadounidense de cuentos de ciencia ficción y misterio Fredric Brown. El estreno, marcado con dos rombos, contó con la mítica cabecera de la serie y la presentación de su creador al modo de otro grande, Alfred Hitchcock. En Brigadoon también podrán verse “El doble”, inspirado en un relato de Ray Bradbury; “El regreso”, que formó parte de la segunda temporada de la serie y estaba basado en una historia de Fernando Jiménez del Oso; y dos adaptaciones de Edgar Allan Poe, “El último reloj” y “El caso del señor Valdemar”, este último emitido en su última etapa, de 1982, producida en color.
Recuperar ahora estas Historias para no dormir cobra sentido cuando la productora Prointel, dirigida por Alejandro Ibáñez, hijo de Ibáñez Serrador y nieto del actor y director de teatro Narciso Ibáñez Menta, confirma que se encuentra en preproducción de una nueva temporada, contenedor de nuevas historias y versiones de otras ya conocidas.
Aunque Brigadoon promete mucho más cine de terror, novedoso y también de décadas pasadas, y consolida su apuesta por los documentales. Y todo ello en el emblemático espacio L’Escorxador, un edificio construido en 1920 y que anteriormente acogió el matadero de Sitges. Allí estaremos.