Guión: Francisco Pérez Navarro
Dibujo y Tinta: Martín Saurí
Álbum tapa dura de 72 páginas en B/N
ISBN: 978-84-679-0194-8
Precio: 16 euros
Norma Editorial[/dcs_p]

Acercarse a una obra como Arturo siempre conlleva cierto respeto, sobre todo en una época en la que el estilo que impera en el mundo gráfico dista mucho de ser el que impregna el trabajo de Francisco Pérez Navarro y Martín Saurí. Las prisas, la inmediatez, las fechas de entrega del mercado actual, nada de eso tiene que ver con la minuciosidad y el cuidado que llevan aparejadas todas y cada una de las páginas de esta obra, adaptación gráfica de una de las leyendas más inmortales de la historia.

Arturo es la historia del rey que logró que Bretaña fuera una tierra unida y un reino comandado por un líder capaz de aglutinar las voluntades de una mayoría dividida. Sin embargo, es también la historia del mago Merlín, de Uther Pendragon, de la reina Ygraine y de todos aquellos que pugnaban por hacerse con el control de un pedazo de tierra ensangrentada por luchas fraticidas.

Pérez Navarro mezcla fuentes tan clásicas como Morte D’Arthur, de Sir Thomas Malory, pero le añade a los personajes de la leyenda una tridimensionalidad que potencia sus rasgos humanos. El escritor no se olvida, tampoco, del elemento mágico propio de la historia, simbolizado éste en Merlín. Junto a sus palabras están los sobresalientes dibujos de Martín Saurí, precisos, detallados y, en pocas palabras, bellísimos. Por momentos se tiene la sensación de estar delante de las páginas de un valioso y centenario códice medieval, soporte ideal para contar una epopeya de estas características.

Puede que, para muchos lectores, acostumbrados al color, a las aventuras superheroicas o los tintes oscuros y deprimentes del llamado cómic alternativo, Arturo sea una obra difícil de asimilar. No obstante, sus cualidades no deberían pasar desapercibidas para todo amante del noveno arte.

Arturo es una obra de autor, de dos autores para ser más exactos, quienes se empeñan con su trabajo en demostrar que el cómic es una disciplina artística tan valiosa como lo pueda ser la literatura, e igualmente digna. Bueno sería que gracias a trabajos como éste nuestra sociedad -y con ella la comunidad educativa- se dieran cuenta de las posibilidades que ofrece el arte gráfico para introducir contenidos didácticos en el aula, dotados de la fuerza y el espíritu que impregnan una obra como esta, en vez de los insulsos libros de textos. Y todo, gracias al trabajo de dos grandes autores españoles como lo son Francisco Pérez Navarro y Martín Saurí.